145 Marlene Castillo, Romulo Torres, Mary Nelys de Almeida y Adriano Luis Hahn Con la modernidad, tratamos de separarnos del "valle de las lágrimas" de la miseria. Nuestro objetivo fue producir siempre más. A pesar de las esperanzas expresadas por John Stuart Mill en el siglo XIX, jamás fuimos capaces de conseguir algún "punto de equilibrio". Seguimos persiguiendo hasta el absurdo la riqueza material y, lo que es más, durante los últimos cuarenta años a costa de una explosión de desigualdades en términos de distribución de la riqueza en la Tierra y dentro de cada nación, a pesar de que las clases medias de países emergentes escaparon de la miseria. Ahora estamos amenazados con el regreso al "valle de las lágrimas", convertido éste en un desierto en llamas. Su planteamiento. El consenso moderno está diseñado alrededor de la producción de riquezas y su distribución. Hoy en día, se trata de ponernos de acuerdo con respecto a la reducción necesaria de la producción y su distribución, es decir, la reducción necesaria de las brechas de riquezas. Dentro de este marco, no hay falta de material para la adversidad democrática: podremos diferenciarnos en cuanto al grado de reducción oportuno de las desigualdades sociales tanto como con respecto al nivel de disminución de la producción y los tipos de producción que tendríamos que favorecer o no. Así propone la ruta de 3 fases. Propuesta de fases para implementar esas perspectivas para volver a la Tierra-Internacional: Fase 1: una respuesta internacional a la emergencia sanitaria y ecológica; Fase 2: cambios estructurales del orden internacional que permiten la coordinación de políticas ecológicas; y, Fase 3: una estrategia internacional de convergencia ecológica. Para cada una de estas fases se hace la sugerencia de 18 medidas hacia una economía "real" al servicio de los bienes comunes, 7 medidas hacia un Estado garante del bien público y de los bienes comunes y 10 propuestas internacionales. La Compañía de Jesús: Ecojesuit. La tercera experiencia destacada. En los últimos años se viene construyendo y aplicando estrategias para fortalecer la participación social en espacios de deliberaciones, garantizar la sensibilización y el compromiso de las potencias económicas e inspirar a iniciativas que nos apoyen a pensar y vivir una nueva rela-
RkJQdWJsaXNoZXIy MjEzNzYz